

Juan Aguilar
Sábado, 25 de mayo 2024, 08:34
La hornachega Cristina Reyes acaba de estrenarse como escritora con un libro llamado «Quiérete Sorda» donde quiere dar visibilidad a las personas con algún tipo de sordera, y las dificultades que se pueden encontrar en el dia a día.
Es un libro donde plasmar «las viviencias» de emprender un viaje de 16 meses alrededor del mundo para conocer en primera persona las diferentes realidades de las comunidades Sordas, que, a pesar de haber sido ignoradas e incluso perseguidas, habitan y en ocasiones, malviven en él.
Cristina cogió su mochila y ha viajado durante 16 meses por todo el mundo, en algunas etapas ha estado acompañada de su pareja y en otras lo ha realizado ella sola.
Si hay algo que destacar del carácter de Cristina es su «Valentía, Empatía, Alegria y Vitalidad», una trotamundos que se ha puesto precisamente el mundo por montera viajando durante 16 meses por todo el mundo con un único fin, conocer la realidad de personas con algún tipo de hipoacausia como la que padece ella plasmándolo en un libro que podríamos definir como autobiográfico aunque también un libro de viajes. Hablamos con Cristina
P – Cristina cuéntanos la historio de tu vida que ha desembocado en este libro «Quiéreme Sorda»
C - Pues yo tengo discapacidad y en mi vida vuelta al mundo he ido buscando y conociendo comunidades de personas con discapacidad, y las realidades de esas personas, su manera de vivir en países diferentes, y las dificultades que tienen en esos lugares las personas que tienen algún tipo de hipoacusia como yo.
En este caso decirte que yo tuve un proceso de adaptación y de abrazar mi identidad sorda por lo tanto lo primero que hay que hacer es aceptarse a uno mismo y saber vivir con el problema que en esos momentos se tiene, de no tener vergüenza, y saber vivir con ello.
P - Nos imaginamos Cristina que has aprendido muchas cosas, y tú también has transmitido conocimiento a las personas que sufren este problema y que cuentas en ese libro
C - Pues si, en primer lugar hay que tomar conciencia de la realidad», no olvidemos que la comunidad sorda está reconocida como un «grupo minoritario» que es Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, tiene su propia cultura, su propio arte, su propia manera de vivir,
P – Que es exactamente hipoacusia
C- En líneas generales es pérdida de audición.
P – Me imagino que no fue fácil para ti porque este libro es autobiográfico, y ya dice mucho «Quiérete sorda»
C - En el mismo yo cuento mi problema de adaptación, la primera parte de la infancia y la adolescencia , como lo viví, en un momento como de aislamiento, viviendo en un pueblo pequeño como es Hornachos, y no teniendo ningún tipo de referentes, viviéndolo también con mucha vergüenza y como a través de varios viajes llego al último donde tuve un proceso de adaptación y de abrazar mi identidad sorda por lo tanto lo primero que hay que hacer es aceptarse a uno mismo, de no tener vergüenza, y saber vivir con el problema que en esos momentos tiene
P - ¿Esa discapacidad que tienes ha mejorado con la medicina?
C- Lo primero que tuve que hacer fue asumir que lo que tengo es una sordera degenerativa, que cada vez va a más, la medicina mejoró mi problema en un momento aunque tengo también otitis crónica y he sufrido siete operaciones, el tímpano lo tengo perforado «me lo reconstruyeron» y luego se volvió a perforar, aunque con los audífonos de momento puedo defenderme bastante bien, tengo que decirte que más que la medicina, la tecnología ha venido a cambiarnos la vida, el bucle magnético los audífonos cocleares, todo eso ayuda a que al final te conectas el sonido de manera más fácil
P- Tuviste Cristina una infancia dura porque decías que te has sentido siempre estar «en tierra de nadie», de vivir en el limbo entre el mundo sordo y el oyente, «de tener un pie en cada uno de ellos» y no establecerse en ninguno de los dos
C – si yo creo que todas las personas hipo acústicas, donde no hay una «comunidad firme», aunque ahora cada vez mas se está visibilizando , pero lo que nos pasa es que nos falta una clara perdida de identidad, «no sentirte sorda señante» pero tampoco podemos meternos en el mundo oyente porque tenemos muchos vacíos, mucha falta de discriminación de sonidos y no se nos puede tratar igual, de hecho se dice que es la discapacidad «mas invisible que hay», la discapacidad auditiva porque en un primer momento no se nota.
P- Has viajado Cristina por todo el mundo donde nos imaginamos «has aprendido» muchas cosas y tu también has transmitido tus conocimientos a las personas que sufren estos problemas
C – Si claro, yo con este viaje también he querido reivindicar un turismo accesible, para ello me creé un blog y redes sociales, para además de transmitir todo lo que iba documentando y conociendo, pretendo «poner el foco», en que no hay nada en «turismo accesible» para personas con algún tipo de sordera como yo.
P - Has pasado en estos 16 meses por países desarrollados y países subdesarrollados e imagino que hay un abismo entre unos y otros para la comunidad que no oye
C- Evidente date cuenta que en India por ejemplo la comunidad sorda sigue «malviviendo», tenemos que tener en cuenta que no pueden heredar los bienes familiares las personas sordas , no pueden hacerse una tarjeta bancaria, las mujeres acústicas o ocultadas la familia por el miedo de perder la dote en el casamiento, lo que hace que se agrava su condición, y claro si estos lo comparas con las personas con discapacidad auditiva en Australia, pues es todo lo contrario; creo que Australia y Nueva Zelanda son los países en los que los gobiernos mas invierten en accesibilidad
P – Como somos y como actuamos las personas que tenemos enfrente alguna persona con algún grado de hipoacusia o algún tipo de problemas auditivos
C – Te contestaria diciendo que «hay mucho desconocimiento» y verdaderamente ese es el problema, hay una comunidad innante que mas o menos puede entenderno a través de la lengua de signo, pero hay personas que son oyentes, que utilizan la lectura labial, y no nos saben tratar, que con hablarnos de frente, despacio, sin gritar son cosas tan básicas, que si se hace cita la boca sin mover la cabeza, nosotros podemos tener un entendimiento mayor, por ejemplo yo para atender una llamada telefónica concretamente tengo que tener un soporte que me facilite la comunicación con esa persona. Hay cosas que con cualquier detalle, podemos mejorar la calidad de las personas con algún grado de sordera.
P - ¿Qué podemos hacer nosotros para mejorar la vida de las personas sordas en la sociedad?
C- Yo creo que todo depende de la educación, y también si me lo permites te diría que incluso algún «protocolo de actuación en todos los niveles sociolaborales de la vida cotidiana», con todo lo que hemos comentado anteriormente, mirar de frente, no taparse la boca, gesticular bien, pronunciar bien….
P – Cual era tu necesidad vital de escribir este libro
C – Sobre todo «reconciliarme conmigo misma», aceptarme tal y como soy, también dar visibilidad a comunidades que todavía malviven, date cuenta que en Siria he sido la primera persona sorda que he entrado en este país después de la guerra y allí me decían «darnos voz» porque aquí la necesitamos», y sería importante recoger su testimonio y saber como lo están pasando, y luego para las personas oyentes dar visibilidad a una comunidad sorda que vive intramuros y que tiene su propio patrimonio cultural
P – Como has hecho ese viaje tan largo y como lo has financiado
C – Todo lo ha sido en auto -spot y utilizando plataformas gratuitas como couchsurfing o o-city donde puedes disponer de alojamiento gratis de personas locales que te ofrecen alojamiento a cambio de cuidar la casa, o pasear a las mascotas. Decirte que todo ha sido financiado a través de ahorros nuestros, en este caso decirte que hemos viajado mi pareja y yo, y que tampoco hemos gastado mucho.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.